Durante el año que viene, Psicólogos Cuánticos cambiará su marca y su imagen corporativa.
Todo lo que tiene vida está en constante movimiento. El movimiento es evolución y así lo sentimos nosotros.
La marca hace tiempo que nació y con ella, una filosofía de trabajo muy especial, que se alejaba de la forma tradicional de trabajo psicológico. Desde que nació este proyecto, muchos han sido los cambios que ha ido teniendo. Recuerdo el primer momento en qué pisé Psicólogos Cuánticos en Barcelona… la magia de ese sitio me invadió. Quise formar parte de ello al instante. Lo formaba un equipo de grandes personas que se cuidaban y ayudaban unos a otros, se nutrían de los conocimientos de cada uno de ellos, y la forma de trabajo que tenían!.., todo ello creaba un gran equipo que inspiraba a todo aquel que entraba. Un día se me ofreció la posibilidad de entrar a formar parte de todo ello hasta el punto de abrir un centro propio de la misma marca, con la intención de expandir esa magia a otro lugar.
Han sido años de aprendizaje, de evolución a nivel personal, de ir recordando quién soy, de dejar caer máscaras y disfraces… Todo ello a provocado una transformación tanto en las personas como en la forma de ver las cosas y de trabajar. Es por ello que el tiempo de Psicólogos Cuánticos como tal ha llegado a su fin para dar paso a un nuevo proyecto, más sincero y natural con el momento presente.
Agradecer a todas las personas que me han acompañado durante este tiempo por todo lo que me han enseñado. Agradecer a las personas que en este momento están conmigo por implicarse con ilusión en este nuevo proyecto.
Queremos transmitir nuestra vocación por la psicología y las terapias naturales como medio para hacer que cada uno de vosotros podáis sentiros más libres y naturales en vuestras vidas, al igual que hemos podido experimentarlo nosotros.
Pronto os presentaremos la nueva marca e imagen, aunque aún habrá que esperar un poco.
Esperamos de corazón que os guste y que podamos mantener este sueño por mucho tiempo, al igual que trasmitir esa magia, que en su día me invadió a mi, a todos vosotros.
gracias, gracias, gracias.
Felicidades por ese cambio. Y la transformación y evolución que os abre nuevos caminos. Álvaro